El satélite argentino SAOCOM 1A de la constelación SAOCOM 1 detectó el derrame de hidrocarburos ocurrido el día 25 de julio en la bahía de Manila, Filipinas y previnieron una catástrofe ambiental.
El derrame fue causado por el hundimiento del buque de MT Terra Nova que transportaba 1,4 millones de litros de combustible industrial.
La Unidad de Emergencias de la CONAE procesó la imagen y, mediante un análisis minucioso, descartó posibles falsos positivos causados por vientos, oleaje y la proximidad a la costa, que también pueden aparecer como áreas oscuras en la superficie del agua. Esto aseguró que la señal detectada correspondiera efectivamente al derrame de hidrocarburos.
Las imágenes de radar SAR (Synthetic Aperture Radar) son especialmente efectivas para la detección de hidrocarburos en el mar y en las costas. La CONAE ofrece diferentes productos SAOCOM según la polarización y el modo de operación.
En este caso, la imagen se tomó en Polarización Doble (HH) y en modo StripMap, donde el radar apunta en una dirección fija mientras captura una tira continua sobre la superficie, proporcionando mayor resolución espacial.
¿ cual fue el operativo de contención de la catástrofe ambiental?
El naufragio del MT Terra Nova ocurrió a unos siete kilómetros de la costa del municipio de Limay, a 42 kilómetros de Manila. Las autoridades filipinas se movilizaron rápidamente para contener el derrame y buscar a un tripulante desaparecido, gracias a la detección oportuna del SAOCOM 1A.
Los satélites SAOCOM tienen como objetivo principal la medición de la humedad del suelo y la gestión de emergencias, como la detección de derrames de hidrocarburos y el seguimiento de inundaciones.
Este proyecto, desarrollado en colaboración con la Agencia Espacial Italiana (ASI), forma parte del Sistema Italo-Argentino de Satélites para la Gestión de Emergencias (SIASGE), que incluye también a los satélites COSMO-SkyMed.
La constelación SAOCOM 1, compuesta por los satélites SAOCOM 1A y SAOCOM 1B, fue desarrollada con la participación de organismos y empresas del sistema científico y tecnológico nacional argentino, como la CNEA, VENG e INVAP.
Los satélites fueron lanzados el 7 de octubre de 2018 y el 30 de agosto de 2020, respectivamente, y tienen una vida útil estimada de al menos cinco años.
La segunda serie de la constelación, SAOCOM 2, incorporará avances tecnológicos derivados de la experiencia obtenida con los primeros satélites, continuando así con la misión de mejorar la capacidad de respuesta ante emergencias ambientales a nivel global.
