El Yoga es una disciplina milenaria que nació en la India. Si bien su origen es religioso y tiene sus bases en la filosofía del hinduismo, en los últimos años ha emergido como una práctica transformadora en la que encuentran beneficios personas de todas las edades alrededor todo el mundo.
En una época en la que vivimos a un ritmo acelerado y repleto de desafíos a los que hacer frente a diario, el yoga se ha convertido en una herramienta más para quienes buscan mejorar su salud física, emocional y, o espiritual.
Existen más de 20 estilos de yoga, algunos más conocidos que otros.
Hay variantes que son más activas y dinámicas a nivel físico, otras más bien pasivas o estáticas, pero la principal característica de esta disciplina en general, es que permite trabajar la flexibilidad y cultiva una actitud introspectiva que ayuda a relajar el sistema nervioso.
El yoga, aunque tiene raíces espirituales y se distingue por su enfoque holístico, es una práctica que busca equilibrar la mente y el cuerpo. Puede ser incorporada por todas las personas, independientemente de que sean creyentes en una religión o no.
Se centra en la conexión entre la respiración y la postura física conscientes, ayudando a generar un estado de equilibrio y armonía.
Sus características clave son:
- Asanas (posturas): El yoga incorpora una serie de posturas que no solo fortalecen y flexibilizan el cuerpo, sino que también mejoran la concentración y la conexión mente-cuerpo.
- Pranayama (control de la respiración): La respiración consciente es fundamental en el yoga. A través de distintas técnicas de respiración, se intenta calmar la mente y aumentar la energía vital.
- Meditación: Regularmente, el yoga incluye momentos de meditación que promueven la atención plena, reduciendo el estrés y mejorando la claridad mental.
- Filosofía: además de lo físico, la práctica del yoga incorpora principios que fomentan la autoconciencia, honestidad y compasión.
Algunas de la variantes más populares de Yoga
- Hatha Yoga: es históricamente la más antigua y la más extendida en todo el mundo. Se trata de una práctica más bien lenta, que requiere concentración y que se focaliza en las posturas o asanas y en la respiración o Pranayama. No es agresiva y es apta para todas las edades. Tiene secuencias simples, en las que se procura lograr la alineación correcta del cuerpo en cada postura. Es ideal para quienes desean iniciarse en el mundo del yoga.
- Vinyasa Yoga o Flow: Es una de las más populares. Es fluida y dinámica. Vincula las posturas con la respiración en movimientos suaves y secuencias. Es perfecto para aquellos que quieran mejorar la flexibilidad, fortalecer y tonificar músculos aprendiendo una dinámica concreta que contribuye a aquietar la mente.
- Ashtanga Yoga: Es una de las variantes más exigentes. Se trata de una secuencia de posturas más intensas, desafiantes y estructuradas, enfocándose en la sincronización de la respiración. El esfuerzo físico en sus secuencias, mejoran y tonifican el cuerpo. Es ideal para mentes inquietas, para quienes deseen un enfoque disciplinado y sistemático o un nuevo desafío físico.
Existen tambien variantes como: Bikram, Kundalini, Bhakti, Raja, Karma, Jivamukti, Dharma, Rocket, Acroyoga, entre muchas otros.
BENEFICIOS PARA LA SALUD
- Mejora la flexibilidad y fuerza muscular.
- Reduce el estrés y la ansiedad.
- Mejora la postura y la conciencia corporal.
- Promueve la relajación y mejora la calidad del sueño.
- Aumenta la energía y la vitalidad.
El yoga es una alternativa que permite mejorar la salud física, mental, emocional, y espiritual, combatiendo el sedentarismo y generando una sensación de mayor armonía y bienestar general.
Ya sea que busquemos un nuevo deporte o paz mental, sin duda el yoga es un camino de ida. Un viaje hacia el autoconocimiento de nuestras capacidades físicas y mentales que todos aquellos que han iniciado, no dudan un segundo en recomendar.
