El 11 de Diciembre llegó a Netflix uno de los musicales más esperados del año en la plataforma. Decimos más esperados, por sus protagonistas: Meryl Streep, Nicole Kidman, James Corden y Kerry Washington; y su Director, Ryan Murphy (Glee).
El musical cuenta la historia de una adolescente lesbiana que quiere ir al baile de graduación con su pareja; pero el consejo de padres no lo quiere permitir, y suspende el baile. Cuando se enteran de esta noticia a través de las redes sociales y frente a un nuevo fracaso teatral, las estrellas de Broadway, Dee De Allen (Meryl Streep) y Barry Gickman (James Corden), junto a dos bailarines (Nicole Kidman y Andrew Rannells) deciden ir hasta la ciudad donde se encuentra la joven y ayudarla en su lucha contra el consejo de padres y de esta forma conseguir publicidad en los medios promocionando «la buena acción».
«The Prom» es una superproducción que cuenta con algunas canciones pegadizas, todas acompañadas de buenas puestas y perfectas coreografías, pero que mas allá de su mensaje contra la discriminación y a favor de la aceptación; no deja mucho más. Ya pasaron por la pantalla muchos musicales que tratan los mismo temas, el musical de Murphy viene a hacerlo con un toque mas moderno, muy colorido y con un elenco brillante donde se luce, como siempre, Meryl Streep, muy bien acompañada por James Corden quien interpreta a un hombre homosexual rechazado por sus padres, entregando una actuación con matices que conmueve.
El film, basado en el musical de Broadway escrito por Bob Martin, expone y critica el «lado oscuro» de estas estrellas: el narcisismo y egoísmo que los lleva a comprometerse con una causa con tal de obtener prensa engañando a la adolescente y al público. Si bien este planteo es solo al comienzo y el film muestra como los personajes hacen un vuelco en sus acciones y se comprometen en serio con la causa de la adolescente, es válida y acertada la crítica a esa faceta de una parte de Hollywood.
